Estancias de Urquiza
Todo es posible vivir en una estancia y Concepción del Uruguay posee muchas, con actividades de todo tipo como pesca, deportes, caminatas o cabalgatas, presenciar tareas rurales, pasear en coches antiguos o sulkys. Si lo que le gusta es la naturaleza encontrará reservorios ecológicos donde podrá realizar avistaje de fauna autóctona y safaris fotográficos.
Villa Teresa, San Pedro, El Vigilante y Santa Cándida, viviendas que pertenecieron al General Urquiza recepcionan hoy a turistas deseosos de disfrutar jornadas de turismo de estancia, en espléndidos cascos.
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La historia y naturaleza hacen de Villa Teresa un verdadero edén
Muy cerca de Concepción del Uruguay, a 30 km. de la ruta nacional 14 y por un camino vecinal, se llega a la histórica Estancia Villa Teresa. Por el año 1795, los padres del General Urquiza compran este campo de 40.000 hectáreas a las que denominan Rincón de Urquiza. Tiempo después su hijo el general Justo José, construye el Palacio San José al cual traslada su vivienda y ocupa la estancia como su casa de campo, donde se retiraba a descansar.
Posteriormente a su muerte en 1870 pasa a manos de su hija, cambiando el nombre por Estancia Villa Teresa. Este histórico casco, donde la historia y la naturaleza viven en perfecta armonía, ha sido recientemente refaccionado, convirtiéndose en un espléndido sitio para una jornada de descanso y recreación.
Conserva la invaluable arquitectura de antaño, a la que se ha sumado una serie de atractivos que pueden ser recorridos en compañía de un guía. Uno de los más importantes, sin lugar a dudas es el predio prolijamente parquizado que rodea la construcción. En este lugar se ha creado un extenso lago artificial en cuyas aguas se puede navegar en kayacs o pasear en las divertidas bicicletas de agua. A sólo unos metros se alza un quincho que funciona como comedor.
Para seguir gozando de su encanto la estancia cuenta con una piscina reluciente para refrescarse o nadar.
Recorrer los alrededores es un paseo obligado, ya sea caminado o en antiguos carruajes, aunque para ir un poco más lejos aún, nada mejor que las cabalgatas. Además las 140 ha. que rodean la estancia están atravesadas por dos arroyos, Las Achiras y el Cordobés, que se unen dando nacimiento al arroyo Urquiza con playas de arenas blancas, donde se encuentra la zona de camping.
El visitante puede pasar el día o alojarse en la estancia, para ello posee tres casas con distintas comodidades. Una, a pocos metros del casco principal con dos habitaciones, un baño, con capacidad para 5 personas. Otra a unos 200 metros que, además de las habitaciones y el baño posee una cocina comedor, donde los turistas pueden realizar sus propias comidas; y por último, muy cerca de la casa principal una pequeña casita para un matrimonio, con baño privado. Las comidas de la casa se pueden disfrutar tanto en el quincho del lago artificial como en el comedor del casco principal.